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El verano es una de las temporadas donde varios depredadores de nuestro jardín comienzan a aparecer, los cuales pueden traer problemas a algunas de nuestras plantas, como también beneficios que los productos para jardinería no pueden entregar.

La palabra depredador puede sonar un poco grande para los insectos que se alimentan directamente de su presa, los cuales utilizan diversos métodos de caza. La gracias de estos insectos es que son visibles al ojo humano a diferencia de algunas plagas (como los hongos).

La presencia de estos enemigos naturales pueden traer varios beneficios a tus plantas, como el control de las plagas de arañita roja, ácaros y pulgones, los cuales son muy complejas de eliminar de nuestras plantaciones. 

¿Cómo mantener la presencia de depredadores naturales?

En general, los depredadores están catalogados como insectos que se alimentan de otros insectos que causan daño a las plantas ayudándonos a controlar de manera natural el daño ocasionado. Su hábitat puede ser amenazado por el uso de insecticidas, los cuales alejan su presencia o ponen en riesgo la vida de ellos, por lo que te recomendamos hacer uso de insecticidas selectivos o biológicos que no los dañen. Otro consejo es mantener condiciones diversas en los espacios verdes, como aumentar la cantidad de plantas de tu jardín, creando un espacio ideal para la presencia de estos insectos.

¿Cuáles son los depredadores que podría encontrar en mi jardín?

Algunos de los depredadores más conocidos podemos encontrar:

• Mariquitas: Son muy conocidas en su total desarrollo por su vistosa caparazón roja con puntos negros (aunque también hay con puntos blancos). Ellas se alimentan de diversas plagas como pulgones o ácaros.

• Chinches de las flores: Se caracterizan por ser de tamaño pequeño y su proceso de desarrollo es rápido. Se pueden encontrar en flores de cultivos o plantas ornamentales. Suelen alimentarse de moscas blancas, huevos de polillas y ácaros.

• Babosa: Estas depredadoras son las más conocidas sin su caparazón, ya que son largas y dejan una estela de baba en su camino. Viven en zonas templadas y son de hábitos nocturnos. Existen especies que se alimentan de gusanos, pequeños insectos e incluso de vegetales.

Aunque existen más especies de depredadores, estas son las más conocidas y reconocidas en la zona, por lo que si ves una en tu jardín, te podrán ayudar a enfrentar las plagas que estén afectando el crecimiento y desarrollo de las plantas y árboles de tu jardín.